Eusebio Leal Spengler ~ Historiador de la Ciudad de La Habana ~
Por: Jaime Masó Torres / Fotos Alexis Rodríguez
Defensor de una obra intelectual sin límites, así como de los valores patrimoniales y arquitectónicos de La Habana, el Doctor Eusebio Leal Spengler ocupó, hace mucho tiempo, un puesto de honor entre los más grandes académicos de Cuba y América Latina. Por tal motivo, no es casual que universidades de varias partes del mundo reconozcan en él, sus méritos y aportes a la conservación, y su lucha incansable por el rescate y la supervivencia de todo aquello que guarda un pedazo de historia, para que las generaciones futuras puedan admirar y también conocer de dónde venimos.
Al valorar estas y otras virtudes que emanan del espíritu del Doctor Eusebio Leal, la Universidad de Oriente (UO) le entregó el Título Doctor Honoris Causa en Arquitectura, durante una ceremonia realizada en el Aula Magna del Colegio San Gerónimo de La Habana, con la asistencia de José Ramón Saborido, Ministro de Eduación Superior y una representación de académicos de la Casa de Altos Estudios de Santiago de Cuba; profesores; ex ministros de educación en el país; rectores y varias personalidades de distintas esferas del conocimiento.
“La intensa y fructífera vida profesional y revolucionaria que ha llevado el Doctor Eusebio Leal, bastaría para señalar que es un cubano excepcional, para quien cada obra implica numerosos retos, y cada logro tiene siempre una evocación mayor”, afirmó la Dra. C. Elsi M. López Arias, Decana de la Facultad de Construcciones, en su discurso de elogio al Doctor Leal. Resaltó López Arias que la UO decidió de manera unánime otorgar el honorable título al Historiador de La Habana, en atención a sus méritos y a la nueva visión que le ha aportado a los procesos de intervención en el patrimonio construido.
“Desde su designación como Director del Museo de la Ciudad de La Habana en 1967 hasta la actualidad, su obra ha ido creciendo; convirtiéndola en ejemplo a estudiar por los investigadores de la materia (…) Su destacado quehacer y constante dedicación a la conservación del patrimonio nacional lo ha convertido en arquetipo de mentor para las nuevas generaciones”, señaló la Decana.
En su lectura a la Resolución Rectoral 90026 de 2016, la MSc. Josefina Fonseca, Secretaria General de la UO, resaltó que gracias al trabajo realizado por la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana (OHCH) se han construido varios hogares maternos, un centro de salud mental para niños discapacitados, entre otros. Destacó también las labores en el Capitolio Nacional y los avances en la reanimación de la Avenida del Puerto, todo ello defendiendo los valores de la arquitectura cubana.
Por su parte, el también Director de la Red de Oficinas del Historiador y del Conservador en Cuba, agradeció a la Universidad de Oriente y evocó a grandes figuras de la educación en nuestro país como José de la Luz y Caballero, Félix Varela y Enrique José Varona.
Asimismo, se refirió a las transformaciones que vivió el sector educacional después del Primero de Enero de 1959. Refiriéndose a la UO, dijo que esta alcanzó prestigio muy pronto “por partir de un núcleo selecto de la juventud de Santiago, ligada, indisolublemente, al sentimiento patriótico”.
Emocionado por recibir tal distinción, afirmó:
“Me alegro profundamente de ser hijo de la escuela de la Universidad cubana, de la educación cubana (…) Tenemos la fortuna de tener una pedagogía asentada en una tradición tan fuerte, que se ha afirmado con razón que los depositarios del sentimiento nacional fueron los maestros. Los que formaron; los que completaron la obra de la familia; los que le dieron a los niños esa voz, ese libro (…) No queremos alumnos, queremos discípulos. Y para hacerlos, como decía Luz, el maestro ha de ser un evangelio vivo (…) Agradezco profundamente a esa Casa de Altos Estudios y profundamente a Santiago de Cuba, hoy todos somos hijos de aquella gran ciudad”.
En tanto, la Rectora de la UO, Dra. C. Martha del Carmen Mesa Valenciano, dijo que dicho título entregado al Doctor Eusebio Leal se une a las variadas distinciones académicas recibidas: como historiador, filósofo, arqueólogo… Destacando su obra como restaurador y las mejores muestras de cómo se puede reconstruir para salvar al patrimonio.
“Hemos acordado entregar ese título en arquitectura, pues es esta una rama del saber que nos proporciona la expresión material de la civilización humana en el tiempo, y que permanece nuevo para su estudio por generaciones posteriores. En sus libros, en sus programas, en sus entrevistas también hemos admirado los modos virtuosos con que sus palabras se adentran en el lenguaje arquitectónico”, expresó la Rectora.
La designación Honoris Causa se concede, fundamentalmente, a personas que se han destacado en espacios profesionales, aunque no necesariamente hayan sido licenciados en esa especialidad. Es un alto honor que concede la academia a personas de un testimonio social reconocido e intachable.
Para finalizar, los asistentes a la ceremonia disfrutaron de las agrupaciones musicales Vocal Habana Clásicos y la Camerata Vocal Sine Nomine con temas de Eliseo Grenet, Pablo Milanés y Gerardo Alfonso.
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