Para no olvidar

Por: Fernando Rodríguez Sosa

“No ha sido fácil hallar el título adecuado para este libro. Tentativamente habíamos escogido Antes y Después, teniendo en cuenta el valor de las imágenes que, tomadas en el cursar de los años, se acumularon durante tres décadas desde aquella mañana del 11 de diciembre de 1967, cunado se me confiara la tarea de coordinar las labores de restauración del antiguo Palacio de los Capitanes Generales y Casa Municipal, en la Plaza de Armas. Lejos estaba de suponer entonces que asistía al suceso más trascendental de mi vida”.

Con tales palabras, Eusebio Leal Spengler presenta este impresionante testimonio gráfico. Colección de fotografías que recupera, en dos tomos, para la memoria, la magna obra de restauración del Centro Histórico de la capital cubana, llevada a cabo, a lo largo de varias décadas, por la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana.

El libro primero reproduce imágenes de fortalezas, residencias y espacios, pertenecientes al entorno de las cinco grandes plazas de la otrora villa de San Cristóbal de La Habana: de Armas, de San Francisco, Vieja, del Cristo y de la Catedral. Aparecen, también, la Alameda de Paula y el área de confluencia del Paseo del Prado y la Avenida de Malecón.

Para el segundo tomo, se han reservado las referencias visuales a calles, casas, parques, comprendidos en los quarteles de La Punta y de Campeche, pertenecientes a la ciudad intramuros; así como algunos escenarios y espacios fuera de la antigua muralla que rodeaba a la villa en la época colonial.

La zona del Centro Histórico que, en 1982, la UNESCO declaró Patrimonio de la Humanidad, abarca 2,1 km. Se caracteriza por su sistema de fortificaciones, sus plazas y plazuelas, así como por 900 edificaciones construidas entre los siglos XVI y XIX y otras 200 levantadas a lo largo del primer cuarto de siglo de la pasada centuria.

Los esfuerzos encaminados a rescatar y conservar esos valores quedan reflejado en estas páginas. “Cuanto fue posible reunir –aseguran sus editores— se presenta en este libro, para no olvidar que la noble tarea de salvaguardar el patrimonio que nos enaltece e identifica en el gran concierto del legado humano, aquí se realiza”.

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