Develan estatua de Confucio en La Habana

diciembre 12, 2012

Por: Yoel Lugones Vázquez / Fotos: Audiovisuales OHC

El Embajador de China en Cuba afirmó que la presencia de esta estatua demuestra que ya se ha llenado un vacío en Cuba y que es un paso sólido para los intercambios frecuentes entre la cultura china y la cubana porque “el encuentro entre diversas culturas son necesarias para nuestro futuro, para nuestro desarrollo y para nuestras revoluciones”

En horas de la mañana de este 12 de diciembre, en el Barrio Chino de La Habana, quedó develada oficialmente la estatua del reconocido filósofo oriental Confucio, donada por la Academia Mundial que lleva el nombre de este pensador y con el objetivo de estrechar los lazos tanto culturales como académicos entre la República Popular China y nuestro pueblo.
El acto estuvo presidido por el Excelentísimo Señor, Doctor Tong Yun Kai, Presidente de la Academia Mundial de Confucio; el Excelentísimo Señor Zhang Tuo, Embajador Extraordinario y Plenipotenciario de la República Popular China y el Doctor Eusebio Leal Spengler, Historiador de la Ciudad de La Habana. Se encontraban presentes, asimismo, representantes de la comunidad china en Cuba, del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos y del Instituto Confucio, así como otras distinguidas personalidades.
En un inicio, la Escuela Cubana de Wu Shu realizó una demostración de bailes tradicionales chinos, con la Danza del León, como buen augurio para la realización de este encuentro.
El Señor Tong Yun Kai agradeció la posibilidad de develar la efigie, en La Habana, de esta gran figura de la cultura milenaria oriental que ha tenido como líneas esenciales de sus enseñanzas la buena conducta en la vida, el buen gobierno del Estado con justicia, y respeto a la jerarquía, el cuidado de la tradición, el estudio y la meditación. Como bien expresó, el Presidente de la Academia Mundial de Confucio las máximas virtudes enarboladas por el imprescindible filósofo y educador deben ser premisas de todo ser humano: la tolerancia, la bondad, la benevolencia, el amor al prójimo y el respeto a los mayores y antepasados.
Por su parte, el Embajador de China en Cuba afirmó que la presencia de esta estatua demuestra que ya se ha llenado un vacío en Cuba y que es un paso sólido para los intercambios frecuentes entre la cultura china y la cubana porque “el encuentro entre diversas culturas son necesarias para nuestro futuro, para nuestro desarrollo y para nuestras revoluciones”.

“Hemos visto cómo los chinos se unieron al pueblo cubano y cómo formaron una familia en Cuba. Hoy son la familia cubana y han colocado los rasgos del pueblo chino no solo en el rostro sino también en el alma de Cuba”, expresó el Historiador de La Habana

Para finalizar, el Doctor Leal reconoció que China es un poderoso mediador de la paz, pues no está en guerra con ninguna nación, y así se ha hecho con el enorme sacrificio de su pueblo revertido no solo en su gente sino en todo el orbe. Expresó su satisfacción de haberse erigido esta imagen de Confucio precisamente en el corazón de un barrio popular y humilde adonde llegaron los chinos en su peregrinación: “Es por eso que las ideas de Confucio adquieren una mayor dimensión, por eso también en nuestra Universidad de ya casi tres siglos de existencia tenemos una cátedra de Confucio donde se enseña su pensamiento, sus doctrinas y sus ideas”.
“Hemos visto cómo los chinos se unieron al pueblo cubano y cómo formaron una familia en Cuba. Hoy son la familia cubana y han colocado los rasgos del pueblo chino no solo en el rostro sino también en el alma de Cuba. Al develar este monumento en el Barrio Chino de La Habana formulo mis mejores votos personales por la paz y la concordia, por la prosperidad de nuestro país, por seguir el ejemplo de la poderosa gran nación china que requiere no ser imitada sino ser interpretada”.

Un regalo muy especial – la réplica en miniatura de la estatua de Confucio –, obsequiada por el Señor Tong Yun Kai al Historiador de la Ciudad, fue el colofón para una conmemoración que celebra la estrecha relación cultural entre nuestros dos países.