La directora general de la Unesco, Audrey Azoulay, se declaró “emocionada de rendir homenaje a un hombre excepcional y de acción, un maestro que soñó con una utopía, y que realizó una gran labor para llevarla a cabo, y un gran amigo de la Unesco”.
La aformacion de la alta funcionaria se produjo durante la apertura de una exposición fotográfica que reunió una síntesis de su vida, ligada a su larga carrera comprometida con los programas patrimoniales, culturales, sociales y económicos ligados fundamentalmente a la rehabilitación de La Habana Vieja, de la que fue responsable como director de la Oficina del Historiador de La Habana.
Azoulay recordó su visita a Cuba en 2019 y donde, a pesar de la grave enfermedad que ya afectaba a Leal, le sirvió como guía de una ciudad de la que mostró “un conocimiento enciclopédico”, y cuya “polifonía arquitectónica que imaginó, reflexionó y rehabilitó” nos debe servir “para que sigamos soñando con ella como él lo hizo”, dijo.
“Pocos historiadores pueden sentirse tan orgullosos y estar tan comprometidos con una ciudad como Eusebio Leal con La Habana”, añadió, y a la cual “dedicó su ida entera a protegerla, y que ahora nosotros debemos ampliar y continuar la tarea que él llevó a cabo”, consideró Azoulay.
“Más de tres mil edificios, 350 de los cuales tienen más de tres siglos, y los cuales estudió, para llevar a cabo una obra con pasión y precisión, con una visión global y minuciosa, y que supo inventar un modelo de gestión novedoso, original y eficiente, donde integró la recuperación del patrimonio con la vida social, económica y cultural de la población que la habitaba”, explicó.
Y sobre este objetivo del Historiador señaló que “no solo trataba de restaurar y proteger su arquitectura, sino la de ubicar en su centro la cultura y todo el patrimonio inmaterial de una ciudad, junto a su dimensión económica y social”.
Para la directora general de la Unesco, su trabajo “nos moviliza a seguir en esa línea por Cuba para proteger su patrimonio y apostando por un turismo sostenible, y también de todo el Caribe, con la óptica de Eusebio Leal nos legó”.
En ese sentido consideró que “el mejor homenaje es reconocerlo como un maestro, pero también darle continuidad a un trabajo que dio el orgullo a una ciudad, a un país y también a nosotros en la Unesco”.
Azoulay también tuvo palabras de aliento para los familiares de las víctimas del trágico accidente ocurrido en el Hotel Saratoga de La Habana, y a los que envió un mensaje de condolencia.
Tras finalizar su intervención la embajadora de Cuba en la Unesco, Yahima Equivel, agradeció la realización de esta jornada de homenaje e hizo entrega a la directora de un doble album fotográfico, donde se recoge la memoria fotográfica de todo el trabajo que Eusebio Leal desarrolló desde que estuvo al frente de la Oficina del Historiador.