Eusebio Leal Spengler ~ Historiador de la Ciudad de La Habana ~
(2012/02/28)
En las instalaciones de la Asociación Cubana de las Naciones Unidas (ACNU), UNICEF presentó en la mañana de este martes el informe del Estado Mundial de la Infancia 2012, dedicado al fenómeno de la infancia en el ámbito urbano.
Este informe anual que desde hace siete años se focaliza en una temática concreta, examina en esta ocasión los principales fenómenos que definen las vidas de los niños en las zonas urbanas, entre ellos la migración, las crisis económicas y los riesgos de sufrir graves desastres.
En conferencia de prensa impartida por el Sr. José Juan Ortiz, representante de la UNICEF en Cuba, junto al Dr. Carlos Amat Forés, Director General de ACNU, y donde asistió como invitado el Dr. Eusebio Leal Spengler, Historiador de la Ciudad de La Habana, Ortiz informó que más de 1000 millones de niños y niñas viven en ciudades grandes y pequeñas, por lo que están creciendo en un medio de escasez y privaciones, generados a partir de la inequidad que está generando diferencias cada vez más insostenibles.
Otro de los fenómenos existentes es la falta de censo en las poblaciones más pobres. Actualmente – comentó Ortiz – existe una cifra exasperante de niños y niñas sin censar que sube a los 196 millones solamente en América Latina: “un niño no censado es un niño que no existe, una niña que no está censada es una niña mucho más vulnerable porque no tiene ningún derecho (…) por tanto ese desequilibrio que se está generando desde el nacimiento se agrava con el ámbito de desarrollo urbano que se forma debido a estas propias migraciones internas que son los barrios que en cada lugar se les denomina de una manera distinta, y que resultan ciudadanos que viven en una ciudad sin ningún tipo de servicio”.
Sobre la actualidad de la Isla, con respecto al informe, el Historiador de la Ciudad mencionó que “para Cuba estudiar el informe es una reafirmación de las razones por las cuales se ha luchado tanto en esta dirección… Hemos contribuido al concepto que la UNICEF tiene sobre la infancia y hemos sido capaces de generar un respeto social para el niño, basado en el principio martiano de que ellos son la esperanza del mundo, porque ellos son los que saben amar…” Leal también comentó, desde su perspectiva personal, cómo contribuye la Oficina del Historiador que también responde a la voluntad política del gobierno cubano, a equiparar las ganancias en función de las sociedad: “nosotros, que trabajamos en una de las partes de la ciudad menos favorecidas – como son los Centros Históricos a escala continental – donde se defiende rodilla en tierra la necesidad de una convivencia entre los muchos y los menos, tenemos por doctrina, y es el símbolo de nuestra organización, tratar de repartir el conocimiento y la equidad, atravesando en el camino de una masa creciente de personas que vienen de todas partes del mundo, a través de la escuela, el hogar materno, el centro de discapacidad, la atención de género, la preocupación por el medio ambiente, todo lo cual es parte de una equidad impalpable, intangible (…) Finalmente el valor no está en lo material, el valor está en el diálogo perenne entre nosotros, nuestro espíritu y la realidad”.
Como recomendación final, UNICEF expresó que en el mundo la garantía de los derechos tiene que ser universal para todos y para todas, debido a que las políticas públicas de cada país no siempre llegan a todos y su focalización en base a la infancia tiene que generar transformaciones inmediatas: una de ellas es dar participación a los excluidos, pensar cómo afectarían las decisiones tomadas a los niños y las niñas que representan el futuro de la sociedad. Cómo incorporar a estas familias y a estos niños en la toma de decisiones es uno de los objetivos fundamentales del informe.
A la conferencia asistieron destacadas personalidades invitadas, entre ellos Herman Van Hoof, representante en Cuba de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura; Sonsoles Rueda, representante del Programa Mundial de Alimentos, así como Carlos Alberto Cremata, director de la compañía de teatro infantil “La Colmenita”, Embajadora de Buena Voluntad de la UNICEF.
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